Tal dia como hoy, a las 5 de la tarde, hora local de Shanghai, aterrizaba en el aeropuerto de Pudong.
Lo único que se veía por la ventanilla, ya antes del aterrizaje, era una niebla espesa y gris que lo cubría todo...sólo se distinguian focos de luz y alguna forma borrosa tras el smog. Pensé: Va a ser un año difícil, sin cielos azules ni nubes...
No tenía ni idea de lo que me iba a encontrar a mi llegada. Estaba nerviosa ya que las últimas semanas habían sido una locura: Vuelta de America Latina hacía casi 15 días, tramitación de la visa china en Madrid, empaquetar todo y mandar cajas a China desde Oviedo, viaje relámpago a Coruña para una última despedida, vuelta a Madrid, viaje relámpago de mis padres desde Bruselas para despedirse...y yo aún sin billete para partir...y con todas mis maletas en la T4 desde hacia días! Todavía no sabía que me iba a tener que armar de paciencia para lidiar con situaciones de lo más rocambolescas e ilógicas desde mi punto de vista occidental...la aventura empezaba!
Este es un dibujo que hice en mi diario la primera noche en Shanghai.
Cuando llegué a la terminal del aeropuerto, estaba Mr. Wang, una mujer que no hablaba ni una palabra de inglés. Me pasó un papelito con instrucciones para mi llegada
Me hizo gracia la situación y respiré tranquila al saber el hotel donde me iba a alojar, ya que antes de marchar me habian propuesto ir a Motel 166...a las afueras de la ciudad...me hubiera muerto de pena alli.
Primera noche en el hotel
Al dia siguiente vinieron Mrs. Wang y Ting Ting a buscarme al hotel para llevarme a la casa que me habian encontrado...no me gustó. Era pequeña y estaba lejos del centro en una zona bastante gris y sosa. Pero me mudé alli ese mismo dia hasta que encontrara otra que me gustase más.
Aunque sólo me quedé una semana en esa casa, la decoré con mis cosas para hacerla un poco acogedora...
No me importaba demasiado no conocer prácticamente a nadie en la ciudad ni ser la única extranjera en la oficina, estaba cargada de energía y entusiasmo por empezar mi nueva vida china. Esta actitud me ayudó mucho a la hora de enfrentarme con situaciones difíciles, que no fueron pocas...
Realmente ha sido un año intenso y estoy muy contenta de haberme venido, de todas las cosas que me han ido pasando, de todo lo que he aprendido, las personas nuevas que he conocido y de los amigos que me han seguido...
Uno de ellos, Tiago me ha enviado hoy este regalin...para celebrar el cumplechino!
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